Yo he tenido el inmenso placer de tener al lado a un individuo con semejante engendro en la muñeca, he de decir que hacia uso de una indumentaria apropiada al reloj, un indumentaria deportiva de color blanco y alguna que otra cadena que yo pensé podía ser de su perro de no ser porque la llevaba alrededor del cuello y era dorada.
El "reloj" denota su procedencia bastarda y asiática varias leguas a la redonda, he de decir que recuerdo dicho episodio con cariño e inmenso placer, aunque dicha visión produjo en mi una impresión imborrable. A Dios gracias la posterior película contribuyo a mitigar el efecto de dicha visión.